domingo, agosto 03, 2008


EL GENERAL DE LA PAZ

EL RECIENTEMENTE DESIGNADO CÓNSUL DE BOLIVIA EN CHILE, GENERAL (R) FREDDY BERSATTI DEJO LA COMANDANCIA EN JEFE DEL EJÉRCITO DE ESE PAÍS Y ACEPTÓ LA PROPUESTA DEL PRESIDENTE EVO MORALES DE ASUMIR LA REPRESENTACIÓN EN SANTIAGO, CAMBIANDO LAS ARMAS POR LOS INSTRUMENTOS DE LA PAZ Y LA NEGOCIACIÓN.

Por Augusto Scarella Arce

FREDDY BERSATTI TUDELA se ve igual de imponente de terno oscuro que como lucía con uniforme. Su estatura y porte son los de un General acostumbrado al mando de un Ejército, puesto que entregó a principios de este año. Su oficina consular, es austera y con mucha iluminación; predominan en ella diversos objetos de arte relativos a la cultura boliviana.

Instalado hace solo cuatro meses, con su esposa en La Paz, “me dijo que me había acompañado toda mi carrera y que ahora era tiempo de hacer la de ella”, señala con una amplia sonrisa que hace comprender cuanto la extraña y que en cuatro meses haya viajado igual número de veces a verla. Pero el presidente Morales requería de sus servicios, fruto de las excelentes relaciones que el General logró con sus pares en Chile y que luego fue extrapolado a otros integrantes del ejecutivo y legislativo nacional.

Bersatti está cómodo en Chile. “Me han recibido muy bien”, dice, relatando que su trabajo ha sido bastante riguroso llevando adelante la agenda de 13 puntos que ambos países sostienen para avanzar en sus relaciones bilaterales.

No es solo el tema del mar” nos cuenta entusiasmado. “Ambos países deben lograr una relación de interacción en todo ámbito, la complementación económica, la seguridad y defensa y la apertura de fronteras, ayudarán a ambos países: Chile no puede ofrecer los mismos servicios y productos que tendría con la cooperación de Bolivia. Para asegurar el futuro, ambos países deben integrarse”.

Apostando por una integración regional que permita una Sudamérica unida, es el sueño que espera ver cumplido el nuevo cónsul. En cuanto a su trabajo, el Presidente Morales lo designó por un plazo fijo que él apuesta a reducir porque “estoy seguro de que lograremos la consecución de la agenda bilateral antes de eso”.

Porque en La Paz, al General lo esperan…….

sábado, agosto 02, 2008


¿ES POSIBLE UN CAMBIO EN LAS PERSONAS?


Una chaitenina erupción del señor corazón, que la señora mente argumenta


Por Augusto Scarella Arce

Worldpress Correspondant


Con el señor corazón acongojado por la deslavada verdad que me enseña, me siento ante esta pantalla a divagar sencillamente, espacio virtual designado a ser nuestro derecho a réplica en una vertiginosa sociedad que no deja mucho espacio para las contemplaciones.


Pueden cambiar las personas? Eso es materia de estudio permanente para aquellos que tengan que ver con la recuperación social de aquellos que han sido materia de resolución jurídica por algún acto reñido por las leyes condicionantes de nuestro actuar.


En esencia, debemos creerlo. De otro modo, la numerosa data existente de casos de reinserción, estaría fallida y deberíamos ponernos a repensar la metodología investigativa existente; repetitiva y probada al respecto.


Pero en esto de las relaciones sentimentales, tema recurrente y objeto de mis actuales divagaciones virtuales, pareciera que la empírica cede espacio a las especiales consideraciones que se deben tener cuando el señor corazón manda y la señora mente; calla.


Cambios en la esencia de como amar son difíciles de adoptar. El sentimiento nos domina y omnubila toda capacidad de crítica que nuestro ser amado nos presente y nosotros mismos, hayamos determinado como posible de ser aceptada.


El amar proviene del señor corazón, ingobernable hasta para los infartos. Ajeno a toda consideración personal o del mejor de los amigos consejeros insufribles, dictatorialmente decide lo que la boca dice, pese a las consideraciones que la señora mente exponga como asesoría inútil como ella sabe, cuando el motor de la vida ha designado un curso de acción.


La noche estaba fría. Presagio de una tormenta que caería rato después, para acompañarse con una especialmente persistente lluvia que ya la querría un productor holliwondense para marcar a fuego el momento expectante.


El calor del ambiente disentía con la fría conversación motivada por los resabios de situaciones pasadas, que infructuosamente trataban de ser sobrellevadas.


Y sobrevino la erupción. Atacando los valores de uno y los hechos del otro, ambos contertulios entraron en el espiral sin retorno de una crisis donde la diplomacia ha puesto sus maletas en el avión y las fuerzas han entrado a la movilización previa al combate.


Como la cordura prima en la señora mente siempre, impuso su posición ante el señor corazón, recurriendo al retiro de la mesa de negociación, quedando la conversación estancada y la posterior rotura de relaciones, consecuencia de la opción del momento.


Luego del esperado análisis controlador de daños, queda en la boca, aguada por la lluvia selladora de la jornada, la sensación de que las partes sostienen su postura y que ésta es infranqueable, lo que aconseja por el bien unitario de los entes comprometidos, un término de proyecto.


Y queda la pregunta sin resolver. Pueden las personas cambiar? Tiene eso algo que ver con la edad o la experiencia?


Creo que ello es motivo de un paradigma diseñado para la ocasión. Las personas no cambian. Solo se potencian o neutralizan ante algo tan fuerte como el sentimiento. Ese que hace olvidar, sobrepasar, obviar, consensuar.


Y como en el caso presente ello no parece opción, es preferible liberar el sentimiento y dejar actuar a la señora mente, ávida de dominio y seguir simplemente, existiendo.


Hasta que el señor corazón, no disponga lo contrario...............


Un saludo a los amantes, de corazón.